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DESTINOS
tica. A continuación acérquese en metro o
autobús al Jardín de Luxemburgo.
Se impone luego una visita al Marais, uno de
los barrios más antiguos de la ciudad. Hote-
les, el museo Picasso, las tiendas de creado-
res, rincones secretos y la tranquilidad de la
Place des Vosges le esperan.
De compras
Desde Montmartre contemple el amanecer
sobre los techos parisinos y aproveche para
llevarse algún souvenir, que allí encontrará
de todo tipo.
Baje luego hasta la Madeleine y sus tien-
das chics, confúndase en la típica agitación
gua de Europa. Puede hacer una pausa para de los grandes bulevares y la magia de las
comer en el Barrio Latino, después atravie- grandes tiendas parisinas en un tour inolvi-
se el Sena hasta la Santa Capilla, joya de la dable. Todas las grandes tiendas disponen
época gótica. de un espacio de cafeterías y restaurantes,
normalmente con hermosas vistas de París.
Luego de pasar por la punta de la Ile de la
Cité y los muelles, llegará al Louvre, antigua Al finalizar el día recorra las vidrieras de la
residencia real cuya arquitectura perfecta- avenida de los Campos Elíseos, la avenida
mente equilibrada le sumerge en la época Montaigne o el Faubourg Saint-Honoré. En
clásica. unos minutos, acérquese al Marais a través
de la línea 1 del metro para conocer artistas
A través de la línea de metro Météor llegará y cenar en este barrio encantador.
al barrio nuevo de la Biblioteca de Francia.
Se trata del corazón del París contemporá-
neo, audaz, desmesurado y elegante y po-
drá culminar la jornada con una cena a ori-
llas del Sena.
Romántico
La recomendación es comenzar en Abbes-
ses, en Montmartre, con un desayuno muy
parisino antes de admirar las vistas desde el
Sacré-Cœur.
Baje luego por la calle Martyrs, llena de tien-
das, hasta el barrio de Saint-Georges, donde
se encuentra el Museo de la Vida Román-
Otro París
Salga desde La Villette rumbo a la Ciudad de
las Ciencias para explorar sus exposiciones
y espacios interactivos. Después de haber
satisfecho su curiosidad, nada mejor que un
paseo a lo largo del Canal Saint-Martin para
apreciar un antiguo barrio popular que está
muy de moda. Las orillas están repletas de
simpáticos restaurantes.
Desde la plaza de la République, situada
un poco más abajo, llegará a Beaubourg, el
Centro Nacional de Arte y Cultura Georges
Pompidou a unas pocas estaciones de me-
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